Este tiempo es difícil para todos, especialmente para nuestros hermanos y hermanas que luchan contra las adicciones. Ayúdalos a entender que sus luchas no definen su identidad y valor.
Ayúdalos a resistir la tentación para que puedan abrazar esa plenitud de vida que Tú das. Bríndales Tu fuerza para defenderse cuando se sientan abrumados y atrae a sus vidas las personas que los van a apoyar.